lunes, 2 de julio de 2012

OLVIDO

No esperes que vuelva
porque me ido para siempre,
no me busques en el cielo,
en el fuego, o en la nieve.

Deja que parta mi cuerpo,
mi alma, mis pensamientos,
hasta los confines lejanos
de este mundo incierto.

Que mis palabras se eleven
como aves que remontan vuelo
para emigrar en busca de la luna
maravillosa de distantes cielos.

El olvido será mi tumba,
el silencio mi testamento;
no quiero ningún recuerdo,
lágrimas o sentimientos.

No hay comentarios:

ESTO

Te molestas, te quedas callada, ignorando los destellos de mi rota alma. En un frío silencio cuales noches amargas de desolación que aplasta...