viernes, 27 de noviembre de 2020

OLVIDO

 Olvido siempre,
ese es mi suplicio,
Las llaves, los versos,
el dolor, los suspiros.

Los mágicos besos
de cuando era niño.
Ese calor amable
de sentirme vivo.

Anécdotas inefables
donde acaso he sido
un protagonista raro
que se ha perdido.

Su mirada, palabras,
sus caricias y silencios
se han caído del alma;
soy un ser vacío.

Empiezo cada día
en la rasa base misma
de quien nada sabe ni tiene;
de vivir sin vínculos.

Olvido, siempre olvido,
el escaso tiempo pasado
que mi rutina ha sido,
el mismo café servido.

La ventana, el paisaje
donde cantan las aves
canciones con mensajes
que nunca he comprendido.

No hay comentarios:

ESTO

Te molestas, te quedas callada, ignorando los destellos de mi rota alma. En un frío silencio cuales noches amargas de desolación que aplasta...