Y LA VIDA

Y la lluvia
es una historia
de ventanas rotas
de calles vacías,
de árboles desnudos
a los que un rayo
sin piedad fulmina.

Y la vida
es una sonrisa
a veces perdida
entre historias
acaso confundidas
con sueños mundanos
de promesas fallidas.

Y tu mirada
todavía me mira
en algunas fotografías
que conservo escondidas
en la memoria más íntima
de mis pensamientos
de soledad que lastima.

Y nada termina,
aunque eso pensemos,
aunque sea necesario
y también una consigna;
todavía perduran escondidas
en el alma las caricias
cuales tibia brisa.

CAÍDO

Sin ramas
el árbol en la plaza,
sin aves que cantan,
niños que lo abrazan.

Se escucha un ruido
cual sordo quejido;
un cuerpo tendido
yace sin nidos.

Cuantas historias
de amor bajo su sombra,
cuantas de esas lágrimas
y promesas rotas.

Donde estaba queda
un espacio de nada,
unas palabras perdidas
y una simple semilla.

Renace así la vida,
ese es ciclo continuo,
se eternizan en los hijos
quienes han vivido.

EN CUANDO

Te busco
de vez en cuando,
en los atardeceres,
en mis manos.

En el océano
en el cual navego
siendo el presagio
de un náufrago.

En el pasado
donde todavía soñaba
que el amor era algo
tal vez mágico.

En estas palabras
que en tus ojos brillan
con esa luz imprecisa
de ser olvidado.

SIGAS

Puse el alma encendida
para que sea sol de la poesía
en cada uno de los días
de esta extraña vida.

Puse la mejor sonrisa
para que sea luna prístina
en las noches mismas
de sueños y fantasías.

Las manos extendidas
en un abrazo que no termina
si eso es lo que necesitas,
si es lo que precisas.

Si es lo que hace falta
para que de este lado sigas,
en este plano existencial
donde me miras.

JORNADA

Puedo caminar
despacio hacia mi casa,
con el viento en la cara,
la mirada colmada
del paisaje abstracto
de árboles en la plaza.

Sonreír sin que haga falta
a esas caras cansadas
de la gente que transita
como si no tuviera alma,
extraños fantasmas.

Puedo llegar al ocaso
de esta singular jornada
con las manos entrelazadas
de unas flores perdidas
que se harán poesía
si me acompañas.

ESPERANZAS

Si me esperas
cada nueva mañana
vendré con el sol
que entra suave
por la ventana.

Seré la brisa
que te levanta,
la sonrisa implícita
en la taza de café
que bebes callada.

Ese libro tuyo
que casi no lees nunca
pero que conservas
al lado de la cama
con esperanzas.

Llegaré un día
en un sueño acaso,
un leve vistazo,
una sombra extraña
que te acompaña.

JORNADA

Otra vez, siempre pasa,
pero duele cada vez más
de maneras muy extrañas;
se hacen añicos los sueños,
se vuelven pesadas nostalgias.

Camino sin mirar adelante
pues adelante ya no hay nada
en el paisaje que me resta
por recorrer con la mirada
hacia una meta ingrata.

Pero nunca muere, dicen,
eso que llaman esperanza,
eso que siempre ilumina
en las noches más cerradas
previos al precioso alba.

Por eso sigo adelante
en las sinuosas caminatas
de estos días venideros
para no morir sin al menos
sonreír otra jornada.

ESPECTRO

Estoy dentro
de tu pensamiento,
en algún recuerdo,
algún sueño.

Espacio incierto
desde el cual contemplo
los albores eternos
del universo.

No tengo tiempo
pues soy eterno,
más allá de todo,
un espectro.

Pues me amas,
me llevas muy dentro
del alma iluminada
por tus sentimientos.

ESTIGMA

Deprisa
se va la vida
cual hoja seca
que el viento pisa.

Apura las cenizas,
la mirada al cielo,
las manos extendidas,
las lágrimas caídas.

El café se enfría
como la poesía
si no llevamos
algo de alegría.

Olvida el pasado,
es un ancla estigma
que inmoviliza
el alma misma.

Somos efímeros,
el tiempo nos lastima,
nos deja graves heridas
cada pasado día.

SENSATA

Quiero la nada
de la paz mundana,
la emoción sensata
de dormir en calma
sin fantasmas.

Quedarme en casa
y mirar por la ventana,
ver así pasar los días,
las estaciones mismas
sin esperanzas.

No es cosa de enigmas,
ni paradigmas de vida,
es que ya la sonrisa
se desdibuja fría
ante la mirada.

El espejo castiga
con su manera prístina
de dar fuertes veredictos
al demostrar que el tiempo
con todos acaba.

DISPERSA

No soy nada
de las apariencias,
apenas una puesta
en vana escena.

Una figura
acaso expuesta
a los acusadores
de ideas huecas.

Unas palabras
que el viento quiebra
contra las paredes
de casas desiertas.

El alma dispersa
entre las hojas secas
de un otoño eterno
lejos de primaveras.

ALTERNATIVO

Entre sombras sigo
la vida que admiro,
ese espacio perdido
en una dimensión
alterna a mi destino.

Por las ventanas
observo sorprendido
a mi otro yo distinto
y a la vez compruebo
que somos el mismo.

Tomar su lugar
sería tiempo perdido,
pues de todos modos
quien observo y sigo
es un sueño lejano
que no he tenido.

JUEGO

No peleo más por ti,
ya no gasto el tiempo;
me quedaré muy lejos,
en este solitario cielo
de lunas sin sueño.

Caminaré ciego
mendigando recuerdos
al tiempo que me ignora
con su frío aspecto
de lejanos ecos.

Me hundiré en océanos
de locura  sin remedio,
si ya nada me importa,
si ya nada es eso
que amé y deseo.

Me dirás altiva
desde tu estrella infierno
que es así la vida misma,
que todo esto es un juego
donde siempre pierdo.