No te busco,
siempre llegas;
de alguna manera
estás cerca.
En la cena,
en la luz apenas
te reflejas
completa.
En las mañanas
puedo ver tu cara
un instante en el agua
que bebo fresca.
En el silencio
que cubre mi alma
descansa esa palabra
que guardas callada.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
-
El tiempo lo cura todo, tiene el poder del olvido: aprendemos a aceptar cada cosa como destino. Perdonamos al pasar los días y la mela... -
No me hablas, el silencio es la herramienta con la cual sutil manejas mis deseos de seguir mis días en la tierra. La nieve no llega en el fr...
No hay comentarios:
Publicar un comentario