Rompo en pedazos
eso que llaman rima,
contra la pared arrojo
las palabras vacías.
Para quebrarlas,
para que sean un enigma;
así se entretiene un poco
quien vea su anatomía.
Apelo a su inteligencia
con mi poca inteligencia,
con mi poca prosapia
de palabras movedizas.
Pero siempre fracaso,
ya casi por deporte,
tengo el vicio horrible
de la poesía primitiva.
Esa métrica que fluye
por mis venas sin prisa,
sale a borbotones
los papeles salpica.
Métrica que se opone
a la moda de que todo,
según se lea, es poesía,
una oralidad corregida.
Un certamen de eventos
dicho con gracia prístina,
hace simpáticos los versos
dictados ahí arriba.
Yo no escribo en voz alta,
no pienso en escenarios,
escribo lo que siempre callo,
lo que no digo si me miras.
Escribo con un molde
roto del pasado, en vano
hago todos los acordes
para un ritmo extraño.
viernes, 19 de diciembre de 2014
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
VIENTO
Aún conmigo, donde quiera que sea, más allá de la esencia misma de la tristeza. De la lluvia que no cesa e inunda todos los recuerdos de esa...
-
No creas en nada de lo que ves apenas, es por lo común la regla de que sean quimeras. Dibujadas ideas, albures en laberintos donde se pierde...
-
Eres parte mía de extrañas maneras; mi luna mi estrella, mis horas oscuras también te llevan. Camino sonriendo al saberte muy cerca de mis s...
-
No sé como ha pasado el tiempo; es breve el camino que tenemos. Las manos se cansan, la mirada se opaca al igual que la boca y el alma se ap...
No hay comentarios:
Publicar un comentario