FECHA

Es el día,
la fecha indicada,
no queda nada
que cumplir
una palabra.

Tan sólo eso,
apenas un minuto,
será la diferencia
que cambie
el mundo.

Después veremos
si era verdad 
todo aquello
o simplemente
un cuento.

EMOTIVA

Llego tarde a todo,
esa es mi sentencia,
de alguna cosa grave
hecha una vida previa.

Como si fuera un ave
sin tener donde posarse
la suerte vuela muy alto,
en cielos sin fronteras.

La veo pasar errante
en espacios tan lejanos
que parece apenas
una difusa imagen.

Un garabato en el libro
de cada hoja de mi vida,
de ahí que es emotiva
mi torpe poesía.

LEJANA

No vienes a casa,
siempre una excusa
te deja lejana.

Donde no puedo
ni siquiera buscarte
con la palabra.

En lugares oscuros
de mi pensamiento
te ocultas muy sabía.

Sabes que no puedo
traspasar esa etapa
donde me amabas.

Donde lo bueno
siempre pasaba
cada mañana.

UNA PALABRA

No sé que es el tiempo,
si es una consecuencia
o un invento.

Si es lo que resta
o lo que queda de todo
en algún momento.

La vivido, lo hecho,
lo dejado de lado,
lo olvidado.

Lo prometido, lo negado,
lo que siempre hicimos
o lo que dejamos.

Una ilusión apenas
por los sentidos creada,
realidad imaginaria.

Si somos infinitos
o tenemos fecha signada
para volver a casa.

Tal vez sólo sea
apenas en un poema
una palabra.

MARCA

No te recuerdo ahora,
no digo más tu nombre,
ni persigo tu fantasma.

Pero queda algo acaso
clavado en el alma,
una espina, una espada.

Una marca indeleble
como un oscuro tatuaje
ya sin ninguna magia.

Camino nuevas sendas,
tengo nuevos proyectos,
un nuevo amor eterno.

Pero poseo en silencio
una especie de recuerdo,
o de olvido sin tiempo.

MENSAJE

Te dejo un papelito,
cual antes cuando era fácil
expresar un sentimiento.

Doblado y pequeño,
en un rincón secreto
que ambos conocemos.

Y espero, siempre espero,
una sutil respuesta,
un mensaje nuevo.

En el aire que respiro
al mirar muy lejos,
más allá del tiempo.

MEDIO

Soy la mitad
de lo que nunca he sido,
de lo que quizás he sido.

La mitad de mis sueños,
la mitad del castigo,
mitad del paraíso.

Medio hombre, medio niño,
medio joven, medio viejo,
siempre en el medio.

Por la linea que divide
el sinuoso camino
del destino.

DE TU ALMA

Te leo, no digo nada,
me quedo en silencio
bajo la sombra clara
de tus palabras.

Anoto a veces
algunas frases tuyas
como consejos de vida,
gotas de sabiduría.

Recito en la brisa
de cada fresca mañana
unos versos de esos
nacidos de tu alma.

Para conjurar el día
con su dulce nostalgia,
con sus hojas secas,
sus nubes lejanas.

Sus tardes eternas,
donde todo tiene magia,
cada hora un recuerdo,
cada recuerdo tu mirada.

EVOCO

Si puedes
ven esta noche,
verás alguna estrella
caer de golpe.

Una brisa fría
acariciará tus mejillas,
la luna será tu guía
en el camino exacto.

No habrá canciones
pues las aves dormidas
sueñan un vuelo alto,
en el cielo, muy arriba.

Quebrarás el silencio
con tus pasos serenos,
con esa paz maravillosa
que tiene tu cuerpo.

Mientras tanto ordeno
todos mis recuerdos,
no quiero que encuentres
un fantasma de esos.

La cena casi preparada,
las copas siempre dispuestas
para las dulces bebidas
de las palabras inquietas.

Unas velas en tu foto,
la sonrisa que repongo
en mi cara acostumbrada
a los momentos que evoco.

DESAMPARO

Esta vez no sé
que pasa con la suerte,
debe haber quedado lejos
donde nadie llegar puede.

En un altar perdido;
en uno de esos manuscritos
enrollados y escondidos
del devenir del destino.

En un planeta lejano
todavía no descubierto,
misterioso entre nubes
de estrellas, polvo celeste.

En tus ojos cerrados
que ya más no me miran,
no son nunca más mi guía,
no son más mi faro.

Será por eso acaso
que deambulo las calles
sin ningún domicilio fijo,
como un desamparado.

Cual ave sin horizonte,
vuelo y vuelo muy alto
hasta caer cansado
en un mar distante.

FUIMOS

Nos fuimos lejos,
más allá de todo
lo recomendable.

De lo bueno,
de lo malo,
lo amable.

Nos quedamos
entre sombras,
en ninguna parte.

Cada cual
en su idea,
nada razonable.

Piedras oscuras
al lado del camino,
sólo eso fuimos.

Por eso estamos ahora
tan cerca pero tan lejos,
no tenemos destino.

No tenemos remedio
más que el olvido
de lo que fuimos.

MARGEN

Esta tarde te busco
en esos libros viejos,
en esas páginas amarillas
que hace mucho no leo.

Esas historias antiguas
escritas con singular lenguaje;
cada palabra tiene su arte,
cada párrafo un mensaje.

Cada capítulo es un espacio
del tiempo donde apareces,
donde respiras y sientes,
donde a veces me quieres.

Te veo en cada palabra,
te siento en cada pausa,
en cada silencio pienso
que también soy marca.

También mi alma de tinta
se dibuja en las esquinas
de las hojas cual cita,
al margen, pie de página.

Para estar siempre cerca,
para nunca más dejarte
en esa oscura biblioteca
donde me olvidaste.

CAMBIO

Con el tiempo
cambian algunas cosas,
los paisajes, las hojas;
árboles, las personas.

La montaña más alta
de a poco se desgasta;
el río más profundo
se evapora en la nada.

Somos el tiempo ido;
el pasado que nos marca,
aceptarlo es aceptarnos
a nosotros mismos.

Para cosas buenas o malas
es nuestra historia cercana
la que determina el resto
de los días del mañana.

Si somos sabios o necios
eso depende de cuan lejos
lleguemos cada jornada
un poco a conocernos.