Debo ser sincero
conmigo mismo,
dejar el egoísmo,
saber mi destino.
Vivo en automático
sin pensar, sin esperar,
sin buscar, ni sentir,
lamentar o llorar.
La rutina esconde
tiempo que se marcha,
descubro en el espejo
esos años que pasan.
No hay nunca nada;
sólo esa sensación
de que algo quizás
deje su marca.
Siempre la esperanza
trunca, como quebrada,
en los pedazos del alma
que el viento arrasa.
viernes, 26 de febrero de 2016
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
CONSECUENCIAS
Hay algo despectivo entre tus palabras; cierta esencia negra contamina el alma de tu apariencia. Tu dulce belleza que parece perfecta tiene ...
-
El tiempo lo cura todo, tiene el poder del olvido: aprendemos a aceptar cada cosa como destino. Perdonamos al pasar los días y la mela...
-
No me hablas, el silencio es la herramienta con la cual sutil manejas mis deseos de seguir mis días en la tierra. La nieve no llega en el fr...
No hay comentarios:
Publicar un comentario