No busques alejarte
demasiado del otoño;
el verano puede tentarte
con su frío repertorio.
Ocasos interminables,
noches más extensas
para que los sueños
hagan mejor su empresa.
El sol es un aliado
al escapar de la tormenta,
nos abriga, nos cuida,
tibiamente nos alienta.
Ten mucho cuidado
pues es todo apariencia,
en silencio todo congela,
lo duerme y se lo lleva.
No seas esa esperanza
de la pequeña estrella
que en su sueño eterno
ahora está en tinieblas.
Mejor te quedas
en la perpetua primavera
siendo una de tantas flores
que forman su esencia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario