Miro al cielo,
trato de fijar la mirada
lo más lejos que puedo,
hasta el infinito eterno.
Veo soles perpetuos
perdidos en el tiempo,
viajo hacia el pasado,
a ese estado primigenio.
Donde todo es un instante
nacido de otro universo,
creación acaso constante
en un ciclo perfecto.
La materia se renueva
en un espacio tiempo;
se expande este universo
en materia negra creciendo.
Las galaxias con sus estrellas
albergan quizás planetas nuevos
donde puede, quizás, habitar
un posible ser como el nuestro.
Mi imaginación se eleva
tratando de atrapar en pensamiento
todo lo que puede en sus teorías
mi pobre entendimiento.
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