Ríes y caminas
unos pasos delante mío,
de repente te das vuelta,
me quedas mirando fijo.
Esperas unas palabras
que nunca a decir atino,
tomas mi mano con fuerza
con un beso nos despedimos.
Me quedo como pensando
en un silencio muy frío,
el sol ya no me importa
sé que no estarás conmigo.
Nunca más volví a casa
porque siempre está cerrada,
no hay nada que ahí me importe
más que recuerdos perdidos.
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