No culpes al destino
de lo que no se ha dado,
tampoco por lo vivido,
mucho menos lo anhelado.
No existen grises albures
que jueguen a los dados
con nuestros corazones,
con todo lo que hagamos.
Se trata de sumar esfuerzos,
no decaer, no cansarnos;
seguir adelante a pesar de todo,
de las caídas y los fracasos.
Después podremos decir
que no lo alcanzamos por algo,
pero que nunca sea nuestra culpa
habernos alguna vez acobardado.
miércoles, 29 de agosto de 2012
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
PARODIA
Con estoicismo entiendo el destino de todo lo que escribo; ni la música ha podido darse un lugar merecido en corazones dignos. Cae en el sil...
-
No creas en nada de lo que ves apenas, es por lo común la regla de que sean quimeras. Dibujadas ideas, albures en laberintos donde se pierde...
-
Eres parte mía de extrañas maneras; mi luna mi estrella, mis horas oscuras también te llevan. Camino sonriendo al saberte muy cerca de mis s...
-
No sé como ha pasado el tiempo; es breve el camino que tenemos. Las manos se cansan, la mirada se opaca al igual que la boca y el alma se ap...
No hay comentarios:
Publicar un comentario