En
verdad no te fuiste,
diste
un paso hacia el futuro;
hacía
una dimensión lejana
donde
sólo llega el alma.
Donde
todo se alcanza
pero
tras un gran sacrificio
que
pocos están dispuestos
a
dar por ese destino.
Por
eso no te extraño,
por
eso aún así sonrío;
porque
sé que me esperas
con
los brazos extendidos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario