El día es gris
como la ceniza,
esas nubes raras
caen de la cornisa.
Golpean la vereda
que silente pisan
oscuros peatones,
sombras sin prisa.
Sin alma ni nada,
sin esperar algo
o buscando acaso
algún milagro.
En su rutina
cual golondrina
que vuela sola
sin brújula fija.
El sol se niega
a quebrar barreras,
tirar abajo los muros
que los condenan.
Entre ellos camino
pues soy lo mismo,
ser sin destino,
mismo olvido.
miércoles, 16 de septiembre de 2015
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
PARODIA
Con estoicismo entiendo el destino de todo lo que escribo; ni la música ha podido darse un lugar merecido en corazones dignos. Cae en el sil...
-
No creas en nada de lo que ves apenas, es por lo común la regla de que sean quimeras. Dibujadas ideas, albures en laberintos donde se pierde...
-
Eres parte mía de extrañas maneras; mi luna mi estrella, mis horas oscuras también te llevan. Camino sonriendo al saberte muy cerca de mis s...
No hay comentarios:
Publicar un comentario