Esta vez la suerte juega
sus cartas a mi manera,
siento que estás cerca,
que el amor no es quimera.
Que puedo soñar contigo
porque antes prohibido era;
vislumbro un atisbo distinto
en tu mirada siempre serena.
Será que se quiebra la rueda
que siempre gira y nada deja,
como un molino de ilusiones
donde mueren todas las esperas.
Sospecho que tu alma puede,
si tu corazón así lo anhela,
darme algo de la dulce dicha
de tu amor para mi vida entera.
Un futuro juntos desafiando
las oscuras estrellas viejas
del cielo de mi universo vacío,
sin sonrisas, ni el cobijo
de ningún cariño cerca.
miércoles, 7 de abril de 2010
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2 comentarios:
disculpas por no comentar... esa dama puede amar, podra corresponder?... besos tinchin, siempre diciendo que me gusta leerte y lo que escribis aunque me cuelgue sin pasar, pero estoy :)
Está bien Naty... Pasaste, lestie y firmaste... Gracias!
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