En este tiempo que termina,
en este ocaso que se apaga,
la noche se hace infinita,
la luna pasea descalza.
Flota sobre las nubes,
se ve reflejada en el agua,
juega con las luciérnagas
como estrellas lejanas.
Los campos son de plata;
ella deja caer su luz mansa
sobre esos paisajes oscuros
para darles su belleza mágica.
Esa belleza que se sueña
en las noches siempre calmas,
con esa paz tan esperada,
con esa dicha que se extraña.
Cuando el día llega
es poco no haber dormido nada,
tener sueño y pensar que el sol
es otra gran metáfora.
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2 comentarios:
...juega con las luciérnagas
como estrellas lejanas...
Tal vez no tenga nada que ver con tus palabras, pero crecí en las sierras y cada verano, de pequeña solía jugar con luciérnagas!....
Me has llevado a mis recuerdos... Lindo poemita como siempre Don Tinchón...besos!
Sos como la luna que juega con las luciérnagas...
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