ahi donde no vemos,
en esa parte oscura,
vedada del cielo.
Influye en nosotros,
en alma y cuerpo,
muestra caminos
totalmente abiertos.
Somos ciegos
ante ella ahi arriba,
es que forma parte
de lo oscuro del cielo
Y si hubiera un sol
también tan negro,
diríamos que los días
son perpetuos.
Somos esa rareza
de materia que refleja
un ancho de banda,
luz visible de espectro.
Una parte pequeña
de un todo más grande,
quizás la residencia
de un milagro errante.
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